Año de creación | 2017 |
---|---|
Dimensiones | 40 A × 38 Al × 4 P cm |
Tipos de arte | pintura |
Estilo | realismo |
Género | floral |
Materiales | óleo, madera |
Vegetación humilde, tenue y controlada, urbana. Plantas a las que no prestamos atención, recordatorio de un vínculo cada vez más débil y lejano con la naturaleza. Hojas y ramas reubicadas en un contexto aún más humanizado, rodeadas de telas y plásticos y observadas abiertamente por el ojo de un lente. Gracias a la pintura se convierten en protagonistas, adquiriendo una repentina dignidad. Este nuevo rol les permite hablar de la soberbia y la incomprensión que en muchas ocasiones domina el actuar humano en su relación con la naturaleza y con sus propios orígenes. El verdadero protagonista de mis obras es el ser humano, aunque no es tan digno de aparecer en ellas como una simple ramita.
Maite Bäckman es de origen sueco-colombiano, aunque nació y creció en Madrid, España. A los dieciocho años se mudó a Estocolmo, Suecia, donde inició sus estudios artísticos. Después de cinco años, volvió a Madrid para estudiar Bellas Artes, licenciándose finalmente en Bellas Artes en la Universidad Complutense de Madrid. Como profesional ha realizado numerosos trabajos de diseño, ilustración y fotografía. Desde 2015, se ha centrado por completo en sus pinturas. Utiliza la naturaleza, generalmente plantas y flores que recolecta de su entorno, para profundizar en la relación del ser humano con su entorno, tratando de comprender también nuestra propia naturaleza como humanos. Como asidua visitante del Museo del Prado, que empezó siendo muy joven, ha vuelto a visitar a pintores clásicos como Velázquez, Tiziano o Rembrandt. Todos ellos tienen una clara influencia en su trabajo. Ha realizado numerosas exposiciones en España, tanto individuales como colectivas. Desde 2017 produce parte de su obra en Maryland, Estados Unidos.