Serie Materia - Comp. n.º 32

Alessandro Idini, Italia

Nacido en Nuoro en 1961, apasionado de la fotografía desde niño, completó sus estudios en Milán, en la Academia de Bellas Artes de Brera, donde se graduó con la máxima puntuación en 1986 con una tesis sobre la evolución del retrato fotográfico desde principios de siglo XX hasta los años 1980. Durante el último año de estudios comenzó a trabajar como fotógrafo en el campo de la moda y creó servicios editoriales para revistas "Beauty", pequeñas campañas publicitarias para estilistas entonces emergentes y retratos fotográficos de artistas milaneses contemporáneos; Tras graduarse decide trasladarse a París, donde, sin embargo, el contraste entre los demasiados compromisos del mundo de la moda y su propia naturaleza extraña le lleva a abandonar este mundo. Posteriormente, tras haberse dedicado durante muchos años al periodismo y a la fotografía de exteriores, en los albores del nuevo milenio empezó a dedicarse a la fotografía artística, que él mismo definió como "la posibilidad de trabajar independientemente del concepto de encargo". Con la serie Flores, obra fotográfica de principios de la década de 1910, rodada en estudio y en gran formato analógico, obtuvo el reconocimiento internacional de diversas revistas de arte y de algunos coleccionistas de obras fotográficas impresas con la técnica del platino-paladio. Posteriormente, tras una serie sobre el paisaje urbano, se dedicó de lleno a la búsqueda de una estética informal; así nacieron las series Fragments, Ekpýrosis y Phaos, caracterizadas por la búsqueda de la abstracción del objeto cotidiano, con su descontextualización y destrucción hasta su renacimiento en una nueva imagen. Pero es con la serie Materia que la investigación sobre el concepto de percepción informal en fotografía encuentra la síntesis ideal de la unión entre las posibilidades expresivas de la forma y los medios mecánicos de disparo, donde el choque entre fluidos de diferente densidad y color crea resultados extremadamente fugaces. formas que dan vida a composiciones que duran sólo un instante, para luego desaparecer en el propio material.